Si está interesado en mejorar su precario estado físico, Sr jugador del GAT, y en bajarle un poco a la contaminación del mundo, lo invitamos a que visite el blog hermano de los Tutti Frutti (hermano por la ortografía, que no tiene nada que envidiarle a la del GAT) y que de paso se deleite con esta historia captada en video, digna de un Oscar a mejor comedia, protagonizada inesperadamente en su punto de clímax por un crédito del club y sus ocurrencias...
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